Meditación canalizada del 20 de agosto del 2016

11191236_503037179847462_807344748_n

Esta meditación puedes hacerla a cualquier hora y día. Hazla cuando tu corazón te indique y si tienes que hacerla.

 

Siéntate de la forma más cómoda para ti. Comienza a respirar relajadamente y cógete el pulso. Durante toda esta meditación escúchalo. Cuando lo escuches cierra los ojos y comienza a visualizar un pergamino escrito con el siguiente mensaje. Léelo:

 

» A VECES CREES QUE NO HAY NADA MÁS ALLÁ QUE LO QUE TUS OJOS PUEDEN VER, TE EQUIVOCAS, PORQUE ESTÁS CIEG@ Y TU CORAZÓN LLORA POR QUE COMIENCES A VER. LA VERDAD ESTÁ OCULTA EN TU INTERIOR, NO EN LO QUE VEN LOS DEMÁS. SEAN CIERTAS O NO ESTAS PALABRAS…, ¿POR QUÉ NO LO HACES POR TI?

JESHUA»

 

 

A continuación visualiza como comienzas a quitarte la piel de todo tu cuerpo, poco a poco, liberándote y sintiendo como cada vez pesas menos. Tómate tu tiempo, tu vida es tu tiempo. Cuando hayas acabado di las siguientes palabras :

«Estoy ante ti tal como soy, no tengo nada que esconder»

Visualiza como un rojo corazón comienza a aparecer en el centro de tu pecho, unas cristalinas aguas se acercan a ti y un maravilloso sol comienza a brillar al fondo. Comienza a caminar introduciéndote más y más en las cristalinas aguas y siente como la luz del sol te acaricia. En ese momento todo comienza a dar vueltas, no sabes dónde estás, déjate llevar. De repente te verás vestido de una época en especial en un templo, al fondo verás dos tronos donde están un rey y una reina. Delante de ellos un hombre de rodillas, cabello con media melena, semi desnudo y sangrando. Ahora dirígete hacia allí, escucha tu corazón, es tu tiempo, aprende. No preguntes si no lo indica tu corazón, no dudes, respétate.

Cuando hayas aprendido la lección de hoy, da GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS, abre los ojos y comienza a ver de verdad.